Su Santidad el Papa Francisco ha autorizado a la Congregación para la Causa de los Santos a promulgar el decreto concerniente al martirio del Siervo de Dios Manuel Galcerá Videllet, hermano del abuelo materno de una dama de esta Lugartenencia. Con ello queda aprobada la beatificación de este sacerdote mártir (sin necesidad de acreditar ningún milagro), aunque, debido a la actual pandemia del Covid-19, la ceremonia puede que se retrase algo más de lo habitual.
El futuro beato nació en Caseras (provincia de Tarragona y diócesis de Tortosa) el 6 de julio de 1877. Hizo sus primeros estudios en el Colegio de San José de Tortosa y los terminó en el Seminario Central de Zaragoza, con el doctorado en Teología. Aficionado a los idiomas, estudió francés, alemán e inglés. Fue ordenado sacerdote el 1 de junio de 1901 e ingresó en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos el 12 de agosto de 1906. Ejerció como administrador o mayordomo durante 23 años en diversos seminarios: Zaragoza, Cuernavaca (México), Badajoz, Barcelona y Valladolid. También fue prefecto durante seis años en los seminarios de Zaragoza, Barcelona, Ciudad Real y Belchite. Fue además vicerrector del Colegio Español de San José de Roma. En 1934 fue destinado como director espiritual al Seminario de Baeza. El 20 de julio de 1936 fue detenido junto con el Siervo de Dios Aquilino Pastor Cambero, que era prefecto del seminario. Fue asesinado junto con otras treinta personas el 3 de septiembre de 1936 en el término municipal de Ibros (Jaén), a la edad de 59 años. Sus restos reposan en la cripta de la Catedral de Baeza.
Toda la Lugartenencia se alegra con esta noticia y se encomienda a la intercesión del nuevo beato.